Factores a tener en cuenta
Si llevas unos días con dolor en el pecho y un conocido te ha asegurado que podrías tener algún problema de corazón debes tener en cuenta algunos aspectos que cobran peso en estas situaciones.
¿Qué síntomas nos deben hacer visitar al cardiólogo?
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Falta de aire (disnea): Esta sensación de ahogamiento puede estar relacionada con diferentes o enfermedades como la ansiedad. No obstante, la dificultad para respirar puede guardar relación con un problema cardíaco cuando está vinculada a que el cuerpo nos pida respirar rápido porque este se encuentre como si hubiera realizado un acto de un importante desgaste, aunque lo que hayamos sea una acción que no haya requerido de un gran esfuerzo físico.
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Tobillos hinchados: En ocasiones se nos pueden hinchar los tobillos por diferentes razones y esto no tiene por qué implicar una enfermedad en el corazón, pero ¿cuándo debo ir a ver rápidamente a un médico? En caso de que además de la hinchazón haya un incremento de las dimensiones del abdomen o una falta de aire. En segundo término, en caso de que a la hinchazón se le añada un enrojecimiento de la piel, un incremento de la temperatura de la zona y una sensación de dolor debo ir a mi centro de salud lo más rápido posible.
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Dolor en el pecho. El hecho de padecerlo no implica que este sea causado por un ataque al corazón, ya que puede estar originado por otros factores: estrés, problemas en la vena aorta, neumonías etc. Puede tener relación con un infarto cuando: – El dolor es muy intenso. – La intensidad del dolor baja si descansamos. – La sensación de dolor está localizada en el centro del pecho. – El dolor no desaparece. – Tenemos ganas de vomitar o de ir al lavabo.
- Sentir palpitaciones. Sentir palpitaciones puede tener lugar en una situación sin ningún riesgo como en otras que si lo tengan. No obstante, deberemos acudir a un hospital o llamar a una ambulancia cuando se alcancen en reposo los 150 latidos por minuto, cuando las palpitaciones sean irregulares y cuando esta sensación vaya acompañada de mareos o falta de aire.
Otros aspectos a valorar
Además de los síntomas mencionados anteriormente también existen otros indicadores por los que deberíamos acudir a un hospital o centro médico aunque no suframos ningún dolor:
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Antecedentes de infarto en la familia. Si hemos tenido familiares directos que han fallecido de un infarto antes de los 55 años, o ha habido un caso muerte súbita en la familia, es recomendable visitar a un cardiólogo desde joven.
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Malos hábitos. Si somos fumadores, tenemos una dieta poco saludable, padecemos obesidad, llevamos una vida sedentaria o ingerimos alcohol de forma habitual también aumenta el riesgo de sufrir cualquier problema de corazón.
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Ejercicio físico de alta exigencia. Si venimos de una vida sedentaria y queremos empezar a realizar ejercicio físico de alta exigencia o de competición deberemos acudir antes a un médico para diseñar un programa de preparación de nuestro organismo antes de empezar cualquier prueba.