Existen diferentes formas de adquirir un desfibrilador; comprar o alquilar los equipos. Ambas opciones tienen sus ventajas y desventajas y, dependerá de las necesidades de cada cliente la forma de adquisición.
Es importante escoger empresas que estén autorizadas a la distribución de este tipo de equipos externos y que cumplan con las normativas establecidas por cada comunidad autónoma.
El escoger una empresa adecuada permitirá crear un entorno cardioprotegido en su organización de forma fácil y duradera.
Adquirir un desfibrilador a través de compra
La primera opción que se plantea, es la de adquirir un desfibrilador a través de una compra. Esta opción no es una de las más comunes en las empresas u organizaciones, ya que estos equipos presentan un pago único y pueden suponer un gran gasto económico.
El factor económico suele ser una de las desventajas de este tipo de adquisición, por ello muchas empresas finalmente no acaban realizando la instalación.
Esta elección tampoco ayuda a crear un espacio cardioprotegido adaptado a cada cliente y a sus necesidades, ya que la obsolescencia de los equipos es un elemento que hace que no se pueda hacer uso de las últimas actualizaciones de estos equipos.
Otro factor a tener en cuenta, es que el mantenimiento de estos equipos no se incluye en los precios de compra de estos equipos, por lo que son las propias empresas que lo compran las que tienen que asumir este coste de forma permanente.
Adquirir un desfibrilador a través de renting
La opción de renting suele ser la forma de adquisición de desfibriladores más común entre las empresas u organizaciones, ya que es la opción más fácil y segura para el usuario.
Esto es debido a que sus pagos se pueden realizar cómodamente de forma mensual y, también es la empresa arrendadora la que se hace cargo del seguimiento de la instalación de los equipos.
Esto permite que los equipos se adapten mejor a las necesidades de cada empresa y sector adecuando el proceso de crear un espacio cardioprotegido seguro para los trabajadores.
Las empresas de renting de desfibriladores disponen de los modelos más actualizados, ya que su constante renovación permite ofrecer las mejores calidades a sus clientes. En el caso de dudas, siempre tienes un equipo técnico que facilita el asesoramiento a aquellos usuarios que lo requieran así como formaciones para su uso y manejo.
Renting de un equipo con mantenimiento
Dentro de las opciones de renting, encontramos planes que incluyen también el mantenimiento de los equipos. Esta sin duda, es la forma ideal de adquirir un desfibrilador para cualquier empresa u organización.
Por una parte, esta opción ofrece los beneficios de un renting, para pagar cómodamente y adaptar la instalación a las necesidades de la empresa, pero además se añade el servicio de mantenimiento para que los equipos siempre estén funcionen correctamente.
Al ser equipos que se utilizan de forma puntual es muy importante que siempre estén en perfecto estado para hacer uso de ellos. Es importante tener en cuenta que el mantenimiento de estos equipos es obligatorio según las legislaciones autonómicas, por lo que tener incluido este servicio en tu tarifa de renting es la opción más acertada.
Otra de las ventajas que ofrece esta forma de adquisición de un desfibrilador es que permite una comunicación directa entre la empresa y el fabricante facilitando así el poder actuar de forma rápida y eficaz con un servicio directo más inmediato y duradero en el tiempo.
El renting que más se adapta a tu empresa
Antes de adquirir el mejor equipo de cardioprotección debemos encontrar aquella empresa que nos garantice unos servicios y quiera acompañarnos durante el camino de crear un espacio cardioprotegido®.
Por eso, desde Neosalus apostamos por los servicios de renting para nuestros clientes, ya que nos ayuda a crear planes y servicios de protección global ayudando directamente con todos los recursos necesarios para salvar vidas.