No somos conscientes de la importancia de tener conocimientos de primeros auxilios ante una situación de emergencia. Saber cómo tenemos que reaccionar en un momento inesperado puede ayudar a salvar vidas.
Situaciones de emergencia pueden darse en cualquier momento, ya sea a una persona que ha sufrido un atragantamiento, una víctima que ha tenido un accidente de tráfico o un apersona que ha sufrido una parada cardiorrespiratoria.
En cualquiera de los casos anteriores realizar técnicas de primeros auxilios durante los primeros minutos es crucial para mantener en vida a víctima. Durante este primer minuto, si actuamos de forma correcta, podemos prevenir muchas secuelas.
¿Qué son los primeros auxilios?
Los primeros auxilios son las primeras actuaciones y medidas sanitarias efectuadas por personal no experto que recibirá una persona accidentada o enferma, y que, posteriormente será atendida por el personal sanitario. La primera respuesta sanitaria que realizamos puede llegar a ser vital.
La principal finalidad de estos es poder mantener las constantes vitales de la víctima en un primer momento, antes que llegue la ayuda profesional sanitaria. Tenemos que mirar de minimizar los daños procurando que queden las mínimas secuelas posibles por los accidentados.
La tarea principal no solamente es hacer las primeras curas, sino también prestar atención psicológica a la víctima y a sus acompañantes.
La necesidad de actuar rápido y de la manera adecuada sólo lo podremos hacer si tenemos conocimientos sobre primeros auxilios de ahí su importancia. Por eso, es tanto importante saber cómo reaccionar y que tenemos que hacer.
Una mala práctica puede ser muy perjudicial para la víctima pudiéndole causar más daños y que las consecuencias sean todavía peores. Por esto, siempre decimos en nuestras formaciones que ante cualquier duda no os hagáis el héroe.
Durante esta atención a la víctima no se pretende que seamos capaces de salvarle la vida, simplemente que sepamos mantener las constantes vitales del herido para minimizar los riesgos y con ello las secuelas que se puedan producir.
Pasos a seguir al ofrecer auxilio a una víctima
Los servicios de urgencia aconsejan aplicar una serie de conductas a la hora de atender a un accidentado: Proteger, Avisar y Socorrer.
- En primer lugar se debe proteger al accidentado. Las personas que no posean conocimientos previos no deberían hacer intentos de rescate de la víctima ya que correrían el riesgo de convertirse en nuevas víctimas. Así pues, el primer paso es señalizar la zona del accidente con las luces y los triángulos de emergencia con el fin de evitar ser golpeados por otros vehículos que transiten por el mismo sitio.
- El segundo paso que se debe llevar a cabo es avisar, contactar cuanto antes con los servicios de emergencia para que asistan a la víctima del accidente, esto incluye: sanitarios, Guardia Civil, Policía…
- En tercer lugar, socorrer a la víctima de forma eficaz, aplicando las técnicas de primeros auxilios de los que seas conocedor. En el caso de que no tuvieras dichos conocimientos, es preferible mantenerse cerca de la víctima pero no realizar ninguna maniobra o técnica para reanimarla.
Formación en primeros auxilios
En Neosalus somos conscientes de la importancia de los primeros auxilios y por eso, ofrecemos varios cursos de formación en primeros auxilios con el objetivo de sensibilizar a las personas y, que sean conocedoras de los procedimientos que debe seguir cuando ofrezcan atención a una víctima.
Dentro de la formación debemos encontrar tanto una parte teórica que pretenda instruir a la persona para que conozca qué debe hacer, como una parte práctica en la que se utilice material para poder impartir una formación más realista y de calidad.
No obstante, hay que tener presente que dentro de la formación de primeros auxilios podemos encontrar diferentes variantes: una formación enfocada a la atención de una víctima mediante el uso de desfibriladores y una formación más dirigida a primeros auxilios básicos.
Confiamos en que cada día más, podamos aprender todos juntos a salvar vidas. Recuerda que ¡salvar una vida puede estar en tus manos!